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¿Está muerto Wesolowski? ¿cómo saberlo? ¿quién ha visto el cadáver?

¿Dónde está el cadáver de Wesolowski? ¿quién lo ha visto? ¿dónde están las fotografías? La verdad, serían bueno verlas, que alguien las muestre o diga donde puede ser encontradas .El anuncio oficial  de su muerte llegó al país como una noticia impactante: Muere Wesolowski, ex Nuncio de su Santidad el Papa en República Dominicana; pero ¿quién ha visto su cadáver?

No es que pretendamos poner en duda la versión del Vaticano sobre el deceso del Nuncio, cuya vida disoluta causó gran escándalo nacional e internacional, pero sería bueno que se publicara una buena foto de su cuerpo sin vida. Mientras más claras las cosas, mejor.

Ya saben nuestros lectores que de su famosa muerte se ha dicho de todo. Lo menos que se ha dicho es que la iglesia lo obligó a tomar la cicuta, es decir, que le exigió suicidarse para evitar un juicio que ya tenía perdido de por sí y que solo expondría la Santa Iglesia católica a un nuevo episodio de vergüenza internacional.

Los dominicanos recordamos que en tiempo de la lucha por la  Independencia nacional el patricio Francisco del Rosario Sánchez, que era perseguido por las autoridades haitianas que dominaban el  territorio. Esa persecución solo terminó  cuando se hizo el simulacro de que  este se encontraba gravemente enfermo, y que pocos días después falleció. Se hizo hasta un funeral  y se simuló el entierro de su cadáver en el Camposanto. Así las cosas, acabó toda persecución en su contra. Eso le permitió continuar en libertad y seguir, clandestinamente, la lucha por la independencia nacional.

Hoy aparece un titular en la prensa nacional donde se informa que los restos de Monseñor Wesolowski serán sepultado en Polonia. Cuándo, en cuál cementerio. Todo lo que rodea las circunstancias que envuelven "la muerte" de este señor está forrada por un halo de misterio. Inclusive la misa que se le hizo "de cuerpo presente" fue dentro de un clima de mucho hermetismo. Tanto silencio y misterio son innecesarios, si no hay nada que ocultar. Se dice que en el férétro hay un muerto; pero de quien es el cadáver. Nadie puede testificar que el cuerpo supuestamente sepultado sea el de nuestro personaje. Ahí radica la cuestión.

Algunos mal pensados dicen que ese señor podría estar vivo. Se anuncia su muerte y sepultura. Nadie ve su cadáver, y luego se a vivir a un lugar lejano, donde nadie lo conoce, se cambia el nombre y cambia la profesión de cura. Y así puede vivir sin mayores contratiempos sus últimos días, y todos felices.

Por eso creemos que su cuerpo sin vida debe ser mostrado,y que debe publicitarse efectivamente su entierro.

Conviene a la iglesia católica hacer eso, o de lo contrario podría darle vida a una nueva leyenda en su contra.


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