Los ex rasos Yorki Rosario Pérez y José Manuel Ramírez Díaz se apersonaron a la residencia de Joan Manuel Valdez Santana en el barrio El Cepillo donde le ocuparon 150 bolsitas de distintos tipos de drogas, entre ellas marihuana, cocaína y crack, así como un revólver y 14 mil pesos.
Posteriormente el microtraficante se puso en contcato con los rasos citados y les propuso que les devolviera las drogas y el arma de fuego, por lo cual les daría seis mil pesos. Los agentes policiales aceptaron el trato, pero solo le devolvieron 90 bolsitas y el revólver.
Al conocer el caso, el comandante de la regional oeste, General Aquino Reynoso Robles dispuso una investigación, que estuvo a cargo del coronel Antonio Calvo Pérez y el teniente coronel Livio Mejía Cepeda , quienes comprobaron que los rasos policiales habían cometido los hechos que se les imputaban
El general Reynoso Robles procedió en consecuencia y recomendó su cancelación, la cual fue aprobada por sus superiores. Posteriormente el jefe policial reunió los policías bajo su mado en la explanada frontal de la institución en San Juan de la Maguana y procedió a quitarle la ropa policial a los agentes cancelados deshorosamente.
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